Viernes, 17 Junio 2016

medallaEl día martes 6 de Marzo, la R.·.L.·. María de Betania N° 2, celebró el primer Día de la Dama de San Juan en reemplazo del mal concebido día internacional de la mujer, que más que un halago, según explicó el Q.·.H.·. conferencista Eduardo Ciotola Mosnich, es una afrenta a las féminas, si se entiende que Mujer etimológicamente proviene del latín mulier, de molleris, de mollare, de donde proviene mullido, molusco, mojado y los posteriores blandengue, fofo. Nada estimulante, ¿verdad?

Eduardo dijo claramente y en voz alta: “Es labor de la nueva masonería, especialmente de los Caballeros masones, acompañar a las Damas con ternura y severidad, a encontrar esas respuestas, pero tendrán que ser…¡sus propias respuestas!”

Reafirmando así que el ahora vetusto modelo de señalar que la mujer complementa al hombre ha de variar por la claridad de aceptar que hoy le toca al varón complementar a la Dama.

Nótese que se propone al varón y no al elemental macho de la pasada época de oscuridad.

Una propuesta singular y muy propia para los tiempos que llegan. Una exposición muy emotiva del conferencista que le dio realce a la ceremonia y que contó con la asistencia de RR:·. Y QQ.·.HH.·. visitadores de jurisdicciones amigas.

En la estación correspondiente la Gran Maestra, M.·.R.·.H.·. Licia Chuecas Velásquez, puso en cada pecho de las Damas de San Juan, el signo del CHI, distintivo de los constructores con el compás y la escuadra, según el monograma de Cristo.

Después de la ceremonia se compartió el ágape comunal.

 

 

A:.L:.M:.G:.D:.G:.A:.

GRAN LOGIA MIXTA DEL PERÚ

“Celebrando el último Día de la Mujer”

Esta noche se festeja por última vez, el Día de la Mujer.

Puede sonar extraño, pero no es casual que en momentos previos a ver la nueva Luz de los Tiempos Nuevos, se celebren tantos días para tantas y hasta extrañas situaciones. Celebramos desde el Día de la Madre, hasta el Día del Pisco pasando por el del Anticucho.

Es como si todos, celebrando tantos “Días”, estuviéramos conspirando contra la noche y la oscuridad, que felizmente ya vamos dejando atrás, al menos Cósmicamente. Pero la inquietud de esta noche, no es sobre esto último. Es sobre aquello que motiva el Homenaje de hoy: el Día de la Mujer.

La palabra Mujer etimológicamente proviene del latín mulier, de molleris, de mollare, de donde proviene mullido, molusco, mojado, y los posteriores blandengue, fofo.

Qué diferencia con la palabra Fémina, voz indoeuropea vinculada con las expresiones fecundus, felix, filius. O con la romántica expresión árabe m´bra, para referirse a sus féminas y del que se deriva en español el denostado Hembra.

O con la palabra Dama, proveniente del francés del siglo XVII, para referirse a la hembra noble, nominación reservada para las féminas de elevada condición moral, fortaleza de carácter o por ser ejemplo de feminidad.

Los tiempos que vienen, son tiempos de Luz y por tanto, no habrá casi nada oculto ante los ojos de la Humanidad.

Y lo primero que aparecerá en su total desnudez, será el Alma de la Mujer.

En las postrimerías de nuestra actual Historia, mucho se habla de conquistas y avances de las mujeres.

Pero eso no debería preocuparnos. Deberíamos preocuparnos si realmente son conquistas y si los avances implican marchas por los caminos correctos.

Personalmente, no creo que haya conquistas por parte de la Mujer. Creo que lo hay en la Historia contemporánea, son reconquistas porque es más acertado pensar que todo lo que hemos visto, al margen de las anécdotas, generan la percepción de que algo perdió la mujer y busca desesperadamente de recuperarlo, pero posiblemente no sepa a cabalidad el cómo, cuándo y porqué.

Es labor de la nueva masonería, especialmente de los Caballeros masones, acompañarla con ternura y severidad, a encontrar esas respuestas, pero tendrán que ser… ¡sus propias respuestas!

Felizmente, la historia también nos demuestra de manera esperanzadora, que siempre se han mantenido los ejemplos, evidentes y no evidentes, de damas extraordinarias. Y también que hubieron civilizaciones que supieron permitir a la Feminidad, ocupar un lugar importante, su propio lugar.

Algunos dirán: “Sí, pero eso ha sido antes”.

La Maestra H.P.B les respondería: “como ha sido, será…”.

Damas: prepárense, porque esos tiempos volverán.

Pero: ¿qué suerte de féminas son las que reconquistarán ese rol? ¿Cómo harán para mantenerlo? Los tiempos futuros estarán en manos de las féminas que tomen conciencia sobre el porqué la mujer ha perdido paulatinamente su identidad de centro, de corazón, de eje, de núcleo.

Las que comprendan que fueron los condicionantes sicológicos y eclesiásticos, los que contribuyeron a eso. Que el posicionamiento de la mujer posesiva, convenenciosa, querellante, emotiva, voluble, hipersensible hasta la fragilidad, o hiposensible hasta la perversidad, ganaron la mente de las nuevas sociedades, y los muchos no hicieron nada al respecto.

Es labor de la Nueva Masonería, y especialmente de los Caballeros masones, contribuir con el reposicionamiento de la imagen de la mujer, acompañándolas en el proceso del Conocimiento de Sí misma, y contribuyendo a que se entienda que el Conocimiento de otros, pasa fundamentalmente por el Conocimiento de uno mismo.

Por otro lado, ante la grandiosidad de las tareas de los Nuevos Tiempos, la Dama Masona, no debe perder Energía y Tiempo en tratar de ser como los hombres, porque no hace falta ser hombre para ser Héroe, o para ser grande. Acéptense a sí mismas, porque en esa aceptación está la Felicidad en reconocer que todos decidimos ser y venir a la Tierra, tal como somos.

Otro aspecto importante, es que no pierdan la identidad múltiple que está en la esencia de toda mujer. No hay castigo, ni expiación en la multiplicidad de tareas que se pueden y deben desempeñar. Por el contrario: hay abnegación y por tanto verdadera y auténtica identidad de su propio género.

Finalmente, y quizá lo más importante, es que ya empecemos a comprender los cuatro ingredientes de los qué está compuesta el Alma de una Mujer: Vida, Energía, Amor y Sabiduría. Y entender también que los tiempos que vienen, son tiempos de la nueva venida del Cristo, pero esta vez, en forma de Energía Crística, cuya composición es, ¡¡mágica causalidad!!,  Amor, Sabiduría, Devoción e Idealismo.

El verdadero protagonismo femenino, de los inmediatos 2,400 años y los 13,000 restantes, dependerá de su capacidad de dar y compartir estos ingredientes a los que nos hemos referido. Y hacerlo sin distinción de razas o credos, para nutrir la anhelada gran comunidad universal a partir de propiciar en la Humanidad, el Conocimiento transformador que debe hacer brillar las almas del nuevo Día.

Así, pues es de desear que esta noche, Sideral por cierto también, aquí en nuestro amado Templo, estemos festejando el último día de la Mujer y que el próximo año, el Amanecer (Sideral también), lo iniciemos celebrando el Primer Día de la Dama de la Masonería en nuestro Universo Sagrado.

Gracias.

Q:.H:. Eduardo Ciotola Mosnich