INSTITUCIÓN CON VALORES
La masonería es una institución centenaria, con unos usos y costumbres que poco han variado con el paso del tiempo. Se podría pensar que con la velocidad con que cambia la sociedad actual los valores de esta institución pueden quedar desfasados, pero una mirada más pausada revela que los valores sobre los que se construye la masonería son atemporales.
Esta vía diferente para lograr este progreso es la que hace que vista desde fuera la institución pueda parecer algo arcaica, pero se fundamenta en un sistema de transmisión del conocimiento que ha demostrado la efectividad durante siglos, aunque las sociedades han ido evolucionando.
La libertad del ser humano, la tolerancia, la justicia,el sentido de fraternidad, la ayuda a los demás son valores y actitudes tan necesarias en la sociedad actual como en la de hace muchos siglos.
INSTITUCIÓN PROGRESISTA
La masonería es una institución progresista, dado que busca el progreso humano y de la sociedad, aunque lo hace mediante unos caminos diferentes a los de otras instituciones, con el fin de ayudar a quien lo necesita en un sentido ético y espiritual, pero también material. En países donde la institución tiene gran implantación y tradición se encarga directamente de hospitales, centros de acogida y hogares infantiles, entre otras actividades.
RETOS DEL SIGLO XXI
Uno de los retos de la masonería en el siglo XXI es seguir contando con hombres buenos y que quieren ser mejores, comprometidos consigo mismos y con el mundo que les rodea, implicados en su crecimiento personal y autoconocimiento.
Del éxito de romper mitos y sombras dependerá que una institución centenaria y que ha ayudado al progreso de la sociedad continúe formando ciudadanos que ayuden a construir una sociedad más justa, tolerante, y solidaria.