¿Qué motivo lleva al candidato a la Masonería fuera del mundo y directo a la escalera hacia la luz? Sólo él puede saber en verdad, pues en su corazón está oculto el motivo de sus trabajos. ¿Busca la luz del Este? ¿Busca la sabiduría eterna? ¿Trae su vida y la ofrece en el altar del Más Altísimo?

De todas las cosas, el motivo es lo más importante. Aunque fallemos una y otra vez, si nuestro motivo es verdadero, somos victoriosos. Aunque vez tras vez tengamos éxito, si nuestro motivo no es digno, hemos fallado.

Entra al templo en reverencia, porque es en verdad el lugar en donde mora el Gran Espíritu, el Espíritu de la Masonería. La Masonería ordena reyes. Su mano ha movido los destinos de mundos, y el fruto perfecto de su moldeo es un hombre honesto.

¿Qué cosa más noble puede ser lograda que la iluminación de la ignorancia? ¿Qué tarea más grande hay que la dichosa labor del servicio? ¿Y qué hombre más noble puede haber que un Masón que sirve sus luces, y es él mismo una luz para sus semejantes?

Manly P. Hall. – Las Claves Perdidas de la Masonería.