Con motivo de la celebración del aniversario N° 101 de la Logia "Luz y Perseverancia" N° 43 de Curicó, el día sábado 17 de mayo se realizó la ceremonia donde se descubrió la señalética que indica el nuevo nombre del Camino a Zapallar por el del distinguido masón, Manuel Labra Lillo.
En dicha oportunidad se contó con la presencia de autoridades masónicas, civiles y uniformadas, además de familiares del homenajeado y miembros de la logia, en general.
Esta avenida es una de las principales vías que comunica el centro de la ciudad de Curicó con el sector oriente de la comuna. Labra destacó en el ámbito social por su trabajo en la Comisión de los Derechos Humanos en la Provincia de Curicó, siendo su primer presidente. En su calidad de abogado, tuvo una destacada labor con amplio compromiso social en beneficio de los más desposeídos.
En el acto, el presidente de la Logia, Guillermo Toral Bustamante, hizo entrega de una copia del decreto que autoriza el cambio de nombre a la viuda de Manuel Labra.
El Concejo de la Municipalidad de Curicó, en el mes de agosto del 2013, acordó el cambio de nombre, lo que se concretó con la dictación del Decreto Exento N° 2400 de ese cuerpo edilicio. Cabe destacar la positiva disposición del Alcalde y Concejales para acceder a la petición formulada por la Logia, reconociendo en Manuel Labra Lillo un destacado ejemplo de compromiso y trabajo desinteresado por el bienestar de los demás.
Manuel Labra era abogado de profesión, hijo de profesores con destacada labor educacional, llegando su padre a ejercer el cargo de Director Provincial de Educación para Curicó, además de haber sido un destacado masón llegando a ocupar, en su debido momento, el cargo de presidente de "Luz y Perseverancia".
Como miembro de la Logia "Luz y Perseverancia" N° 43 de Curicó, cumplió un significativo rol en los desafíos post terremoto del 3 de marzo de 1985, oportunidad en que la casa masónica de calle Membrillar N° 567 fue totalmente destruida. Presidió la Comisión de Reconstrucción que permitió adquirir una propiedad de 2 hás. donde se levantó el actual templo, amplios salones y un complejo deportivo para beneficio de la comunidad. Hoy, precisamente la Logia se ubica en la Avda. Manuel Labra Lillo N° 430.
Manuel Labra Lillo falleció en el año 1986, como resultado de un trágico accidente automovilístico.