Con una importante presencia de una delegación del Cuerpo de Bomberos de Parral, presidida por su Comandante Gonzalo Ruiz Zurita, la jurisdicción Maule Sur-Perquilauquén, celebró el homenaje a Bomberos en la ciudad de Parral. En la oportunidad se premió con la medalla "Germán Tenderini" al actual presidente de la logia parralina “República” N° 69, Francisco Miguel de Gracia Martínez.
Como dueño de casa ofició el ex presidente de la Logia, Patricio Troncoso Valenzuela, quien saludó a los asistentes, dio a conocer nuestros principios, e hizo emotivos recuerdos de los Hermanos fallecidos que formaron parte del cuadro Logial.
En la ocasión, el Gran Delegado del Gran Maestro de la Jurisdicción Maule Sur-Perquilauquén, Juan Eduardo Urrutia señaló: "Sabemos que el trabajo de un Bombero no da gloria ni riquezas, sólo la satisfacción del deber de un servicio prestado, es un trabajo muchas veces anónimo y que requiere de sacrificios familiares o pasatiempos que no puede disfrutar, de alguna manera también nos sentimos interpretados bajo esta premisa, porque el esfuerzo y sacrificio muchas veces va de la mano con aquello”.
“Por eso, en esta ocasión –agregó- nos encontramos muy complacidos, y nos inunda un sentimiento de felicidad y orgullo, porque el voluntario propuesto y elegido por el Cuerpo de Bomberos de Parral es nuestro muy Querido Hermano Francisco Miguel de Gracia Martínez, quien también pertenece a ambas instituciones, donde ha ocupado altos cargos de representación, y en nuestro caso, ser el primero entre sus iguales”.
“Nuestro muy Querido Hermano Miguel, se ha caracterizado durante mucho tiempo por su encomiable trabajo en nuestra institución, liderando, orientando y focalizando el trabajo tras un perfeccionamiento que permita al Hombre ser mejor como persona, para que de esa forma contribuya en forma eficiente a la buena convivencia familiar, laboral, social, en fin, de toda relación que lo involucre con su entorno cotidiano”.
“Sin duda alguna – terminó diciendo Urrutia- que los principios de ambas instituciones han logrado encadenarse en esta ocasión, para darle firmeza y sostén a la construcción del edificio espiritual, libre de amenazas que puedan atentar contra su integridad y crecimiento, colocando siempre el sello de la honorabilidad, respeto, tolerancia y mucha fraternidad".