La afirmación la hizo en su alocución durante la solemne ceremonia con que la Gran Logia de Chile celebró los 150 años de su fundación en el salón de honor del Congreso Nacional, en Valparaíso.
El acto solemne estuvo engalanado con un masivo público que llenó las aposentadurías del Congreso Nacional, con el público porteño y delegaciones que vinieron de todo el país.
El Jefe de Estado ingresó al recinto acompañado por el Gran Maestro de la Gran Logia de Chile, Luis Riveros Cornejo, siendo aclamados por más de un millar de personas que colmaron la sala plenaria y tribunas del Parlamento.Abrió el acto el Gran Maestro quien agradeció la compañía de autoridades civiles, militares, ministros de Estado, parlamentarios, bomberiles y otras instituciones para conmemorar los 150 años de la Masonería, que hizo extensiva a representantes de grandes logias de Argentina, Brasil, Bolivia, Colombia, Canadá, México, Paraguay, Perú de Rusia, que viajaron a Chile para participar en los actos. Luego de reiterar el Gran Maestro que, tras de cumplir sus primeros 150 años en Chile, la Masonería continuará la tarea de construir un mejor país, habló el Presidente Piñera.
El mandatario dijo que la Masonería ha difundido importantes valores con coraje y dedicación, para conseguir, entre otras cosas, la ley de instrucción primaria obligatoria, las leyes laicas, el registro civil, leyes sociales y el Código del Trabajo, obtenidas bajo el signo de la tolerancia y reforzando los conceptos de libertad, igualdad y fraternidad.
El Presidente Piñera abandonó el Congreso tras recibir un presente recordatorio del Gran Maestro. El acto terminó con la conferencia del sacerdote jesuita José Ferrer Benimeli, director del Centro de Estudios Históricos de la Masonería de la Universidad de Zaragoza, España.
Las delegaciones participaron después con un almuerzo en el Bote Salvavidas, cuya dirigencia entregó un recordatorio al Gran Maestro, considerando que esa institución de resguardo de la vida ante accidentes marítimos, tuvo una clara inspiración masónica. Posteriormente, los masones se dirigieron al cementerio 1, en una romería para rendir homenaje al primer Gran Maestro y fundador dela Gran Logia, Juan de Dios Arlegui y Gorbea.