La Gran Logia Regular de Colombia de Menfis - Mizraim ha sido creada para albergar estructuras organizativas que contienen vías Iniciáticas legítimas y regulares que pueden llevar a los adeptos a su realización íntima.

Mayoritariamente habrá Logias cultoras del Rito Antiguo y Primitivo de Menfis - Mizraim, así como Talleres del Rito o Régimen Escocés Rectificado y del Martinismo de la Orden Martinista Iniciática. Posteriormente desarrollaremos estructuras diversas que permitirán que Hermanos con afinidades por otros Ritos puedan integrarse a nuestros trabajos para completar nuevos escenarios Iniciáticos y que tendrán que ver con formas como la Masonería caballeresca, las formas templarias y otras. En todo ello, siempre seguiremos las disposiciones de la Gran Hierofonía Mundial y la reproducción de las formas místicas rituales y espirituales que ella proyecte para sus Grandes Logias, como lo es para la nuestra.
 
El objetivo nuestro será la creación del Colegio Hermético de Colombia, de las Comendadurías del RER y de otras grandes organizaciones que darán una riqueza iniciática jamás antes vista en la Masonería colombiana.
 
Las Patentes respectivas provienen del Gran Copto Mundial o XII° Gran Hierofante Mundial, Michel Gaudart de Soulages, y en el desarrollo de estos proyectos estaremos bajo sus enseñanzas y protección espiritual. 
 
Para los Hermanos fundadores de nuestra Gran Logia Regular de Colombia de Menfis - Mizraim es un enorme honor y una gran responsabilidad ser los receptores de las grandes tradiciones iniciáticas que han fecundado la espiritualidad y el esoterismo europeo (y oriental) de los pasados cinco o seis siglos, así como poder comprender y tener la posibilidad de trabajar en las corrientes Iniciáticas más importantes de todos los tiempos que han dado el trasfondo y el relieve espiritual a la Masonería Universal.
 
Para quienes aspiran a integrarse a estos procesos de desarrollo institucional, les decimos que nuestras posibilidades de crecimiento son ilimitadas como ilimitado es el espíritu humano. Es un renacer espiritual de nuestro presente masónico que sienta las bases para muchas nuevas perspectivas.