La Masonería de Nuevo León de LUTO

LOS MASONES SABEMOS INTERPRETAR LA LLEGADA DE LA MUERTE. EL DESIGNIO DE DIOS, PARA UNOS, DESIGNIO DEL GRAN ARQUITECTO DEL UNIVERSO PARA NOSOTROS. VIAJAR AL ETERNO ORIENTE. AQUI UNA COLABORACIÓN POR LA IRREPARABLE PÈRDIDA DE ENTRE NOS DEL BUEN AMIGO Y MEJOR HERMANO, HÉCTOR TREVIÑO FLORES- Q.E.P.D.

 

LA MASONERÍA DE NUEVO LEÒN DE LUTO

Falleció  HÈCTOR TREVIÑO FLORES

(Examinádlo todo, y quedaos con lo bueno"...1a. Tes. 5;21)

                                                                                                                                Por Ariel Núñez

 

 

     La Masonería de Nuevo León y de México, han sufrido la irreparable pérdida de una de sus columnas. Ayer pasó a ocupar su lugar en el Eterno Oriente el Querido Hermano Héctor Treviño Flores.

     Un nutrido grupo de masones se dieron cita en las capillas ubicadas al sur de la ciudad, por Ave. Revolución. Presentes ahí, encabezados por el M:. R:. G:. :. Felipe Cuitláhuac Martínez Alcántara,  así como también el Q:. H:. Héctor Arredondo Cano, Diputado Gran Maestro, se realizó una guardia de honor. Presentes los miembros de la R:. L:. S:. “Leyes de Reforma Núm. 67”, de la cual era miembro activo el hermano Treviño, y en emotivo mensaje el Gran Maestro, dedicó sus palabras honrando la memoria del  hermano Héctor Treviño, de quien dijo, “No es por obligación que estamos aquí para despedir a nuestro hermano fallecido, no es por costumbre, es por el hecho de compartir entre los familiares, amigos y masones el dolor que nos embarga, la pena de sentir la separación de esta vida terrenal y ocupar su columna en el Eterno Oriente, descanse en paz el Hermano Héctor Treviño”.  

     Carlos Díaz Carrera, ExGran Maestro,  embargado por el sentimiento, dijo,”lo recordaremos siempre como el maestro masón, siempre atento a lo que pudiera colaborar”

     Entre los oradores el Dip:. G:. M:. Héctor Arredondo Cano, dijo, “Hacemos acto de presencia, para desear  a la familia del buen amigo y hermano Héctor Treviño, pronta recuperación espiritual que Dios dicta en estos casos, el hermano Treviño, siempre fue un miembro activo en nuestro Taller y un enamorado de la justicia;  colaboró para ver realizado el sueño que no alcanzó a testificar, ver el templo de su logia”. El hermano Manuel Rojas, declamó el Salmo 133, parábola bíblica de la masonería.

     Nuestro activo hermano Héctor Treviño Flores, tuvo una militancia de mas de 40 años en la filas de la masonería, el firmamento masónico pierde un valioso  elemento. Su familia acordó entregar en las honras fúnebres de Gran Logia, una parte de sus cenizas para conservarlas en lugar un sitial de honor. ¡Descanse en Paz!